Día Mundial de la Diabetes
Cada año, se conmemora el Día Mundial de la Diabetes para crear conciencia sobre esta enfermedad, su impacto en la salud y el bienestar de las personas y las estrategias eficaces que pueden utilizarse para prevenirla y controlarla. Este año es único debido a la pandemia de COVID-19 y los muchos desafíos que ha supuesto, tanto para las personas con diabetes como para sus proveedores de atención médica.
El Día Mundial de la Diabetes (DMD) fue creado en 1991 por la Federación Internacional de la Diabetes y la Organización Mundial de la Salud en respuesta al aumento de la preocupación por la creciente amenaza para la salud que representa la diabetes. De acuerdo con las cifras de 2005, la OMS estima que en el mundo hay más de 180 millones de personas con diabetes, cifra que muy probablemente, de no mediar intervención alguna, para 2030 se habrá más que duplicado. Casi el 80% de las muertes por diabetes se producen en países de ingresos bajos o medios
¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad que se produce cuando el páncreas no produce suficiente insulina, o el organismo no utiliza eficazmente la que produce. La insulina es una hormona que regula el azúcar en sangre. Si no se controla puede dar lugar a hiperglucemia, que es el aumento del azúcar en la sangre.
Tipos de Diabetes
Existen dos tipos principales de diabetes, además de la diabetes gestacional:
- Diabetes tipo 1: el cuerpo no produce suficiente insulina. Las causas y los factores de riesgo de este tipo de diabetes son desconocidas. Las estrategias de prevención tampoco han resultado eficaces hasta el momento.
- Diabetes tipo 2: el cuerpo no gestiona correctamente la insulina que produce. Cuanto mayor es el perímetro de cintura y más elevado en Índice de Grasa Corporal (IGC) mayores posibilidades de desarrollarla. Este tipo de diabetes puede prevenirse y es mucho más frecuente que el tipo 1.
- Diabetes gestacional: es un tercer tipo de diabetes y se caracteriza por el aumento de azúcar en sangre (hiperglucemia) durante el embarazo con valores superiores a los normales, pero no tan elevados como para diagnosticar la enfermedad. Las mujeres que la desarrollan corren más riesgo de sufrir complicaciones durante el embarazo y el parto. Y además tanto el bebé como la madre tienen más posibilidades de desarrollar diabetes del tipo 2 a lo largo de su vida.
Síntomas
Los síntomas de la diabetes pueden ser sutiles así que presta atención a tu cuerpo y si observas varios de estos síntomas consulta a tu médico:
- Sed excesiva y acudir con más frecuencia a orinar: el exceso de glucosa en sangre provoca que los riñones tengan que trabajar más para eliminar el exceso y cuando no pueden seguir el ritmo, la glucosa sobrante se elimina en la orina, provocando una deshidratación, que te provocará sed.
- Cansancio: la diabetes deteriora la capacidad del cuerpo para usar la glucosa en las necesidades energéticas, así que probablemente te sentirás fatigado.
- Pérdida de peso rápido: con la pérdida de glucosa por la orina, también se pierden calorías. La glucosa de los alimentos también tiene dificultades para llegar a las células, lo que provoca un hambre constante. La combinación de estos dos factores puede causar un adelgazamiento.
Otros síntomas son visión borrosa, llagas de curación lenta, infecciones frecuentes, hormigueo en manos y pies y encías rojas y sensibles.
¿Cómo prevenir la diabetes?
La diabetes tipo 1 no se puede prevenir. Los médicos ni siquiera pueden saber quién la desarrollará y quién no.
En la diabetes tipo 1, el sistema inmunitario ataca el páncreas y destruye las células encargadas de fabricar insulina. Nadie sabe con seguridad por qué ocurre, pero los científicos creen que su origen está relacionado con los genes. Los genes vienen a ser instrucciones sobre el aspecto y el funcionamiento del cuerpo que se transmiten de padres a hijos. Pero el mero hecho de heredar los genes para la diabetes no suele bastar para desarrollar esta enfermedad. En la mayoría de los casos, tiene que ocurrir algo más, como contraer una infección vírica (de un virus), para que una persona desarrolle una diabetes tipo 1.
La diabetes tipo 2 se puede prevenir llevando un estilo de vida mas sano:
- Elige alimentos que sean buenos para tu salud. Intenta comer alimentos con bajo contenido en grasas, pero con un alto contenido en otros nutrientes, como cereales y panes integrales, frutas, verduras, productos lácteos y proteínas magras. Estos súper-alimentos te proporcionarán los nutrientes que necesitas para crecer, pero también te ayudarán a alcanzar y a mantener un peso saludable, lo que puede ayudar a prevenir la diabetes tipo 2.
- Limita el consumo de comida rápida y de refrescos azucarados. Ingerir gran cantidad de comidas rápidas llenas de calorías, y bebidas de alto contenido de azúcares, como los jugos, los refrescos o el té helado, contribuye al aumento de peso.
- Mantente activo. Otra forma de ayudar a prevenir la diabetes tipo 2 consiste es mantenerse activo y disminuir el tiempo que pasas en actividades sedentarias (como ver la televisión, jugar a videojuegos, usar Internet o jugar con la computadora). No es necesario que te apuntes a un gimnasio o que practiques tres deportes por año; mantenerte activo puede ser algo tan sencillo como pasear al perro o cortar el césped. Trata de hacer actividades que te mantengan en movimiento cada día.
- Si tienes preguntas sobre tu peso, no dudes en preguntar. Si crees que puedes tener sobrepeso o, simplemente, no sabes qué significa exactamente estar saludable, pide ayuda a tu médico. Estos profesionales de la salud te pueden ayudar a saber cuál es tu peso ideal e indicarte cómo conseguirlo y cómo mantenerte en ese peso.